CLASE POLÍTICA

*Guerra morenista, como en el pasado conservadurismo*

*Que se extrañan, hay dados cargados en el proceso interno

*Renovar o morir, en el conclave Castillejos, Sales y Toledo*

*Oligopolios partidistas, para crear la propia competencia en Morena

*“Morenistas” señalan a Laura García Arjona de traidora  y conspiradora*

*En el congreso, regresan el dinero a las secretarias

*Tuxtla Chico, de pueblo mágico, “a pueblo fantasma”*

Por. ANTONIO ZAVALETA HERRERA

La lucha frontal para la gestión y acaparamiento de consejerías estatales en el marco del proceso interno para seleccionar al próximo dirigente estatal del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), ha convertido la plaza principal de la transformación en un vil cochinero.

Hay constantes  contra-líneas hacia los propios aspirantes, incluso la caída imprescindible de Enoc Hernández Cruz, quien buscó a los cuatro vientos meterse al proceso como la humedad. Ya no estaba compitiendo por una dirigencia, con las facilidades que le dieron en el pasado sexenio.

Salió como tapón de sidra al ser señalado de caballo de Troya y comparsa del senador Eduardo Ramírez, mientras en los banquillos guindas al súper delegado de programas federales, José Antonio Aguilar Castillejos, igualmente le tunden hasta por debajo de la lengua, por ser comparsa con el actual dirigente Ciro Sales Ruíz y Marcelo Toledo, ambos en busca del escaño morenista para evitar la irrupción de Carlos Molina Velasco, quien se encargó del pasado proceso electoral mediante palomazo de la federación.

Que se extrañan, hay dados cargados en el proceso interno

Para algunos militantes que se dicen fundadores, Carlos Molina, fue incrustado con calzador y hoy en día lo tildan de tener los dados cargados, incluyendo el apoyo oficial con camionetas blindadas.

A nadie debería de extrañar y menos a los aliados de José Antonio Aguilar Castillejos, que el joven dirigente tenga privilegios, siendo la realidad del instituto político que gobierno el país.

Tiran línea, pero desatan hecatombes terrenales por la falta de oficio político y sobre todo, disciplina partidista. Eso sí, las listas de inscripciones vomitan de aspirantes, dejando entrever que Morena sigue posicionado por encima de la lucha encarnizada del Va por México. Y es que, hasta el movimiento Frena, por arte de magia, se frenó.

Renovar o morir, en el conclave Castillejos, Sales y Toledo

Por la forma en cómo se maneja, Carlos Molina Velasco, trae el respaldo del dirigente nacional, Mario Delgado Carrillo, quien buscó paz y conciliación en Chiapas, al darle su cobijo a Ciro Sales Ruíz, pero no midiendo que el oriundo de Escuintla, es compadrazgo de Marcelo Toledo y el súper delegado, en busca de acaparar las consejerías estatales con el propósito de consolidarse rumbo a la toma de decisiones de la asamblea ordinaria. Hablan de la intervención de Manuela Obrador en el proceso, aunque queda el beneficio de la duda, sobre la mano que mece la cuna, pues el acaparamiento general y total es inminente.

Los que perdieron fuerza, quieren fortalecerse y revivir muertos, mientras los que están, pretenden desplazar a los “tildados de caducos”, en una clara pugna interna como las vividas en el desbaratado Partido de la Revolución Democrática (PRD), incluso peor que los tiempos de convenciones priistas, con un resquebrajamiento por ambición y hambre de poder.

Pese al estira y afloje, finalmente los pensantes, juristas y analistas en Chiapas y la nación, ya sabe que prosigue.

Oligopolios partidistas, para crear la propia competencia en Morena

Harán la elección de consejeros; elegirán a los que mejor les convenga para mantener aceitada la máquina del actual sistema, prevalecerán los más aliados, erradicarán a los traidores y por el hecho de violentar los preceptos de la cuarta transformación, les harán al fuchi, orillándolos a emigrar con otros partidos políticos.

Así como pintan las cosas, todo lo que huela y se mueva con la insignia del Jaguar Negro, lo querrán paralizar y erradicar en una clara lucha frontal por el poder sexenal en el 2024. Ya hay cartas barajeadas y por encima de las aspiraciones de Ricardo Monreal, Claudia Sheinbaum y  Marcelo Ebrard Casaubón, está la de Adán Augusto López Hernández, mientras que en Chiapas, prevalece el cuento de impulsar a Zoé Robledo, pero en una reciente encuesta cierran filas contra la embestida proveniente del bunker del Güero Velasco.

Cran contra Cran del propio Morena, para evitar la irrupción priista de Alejandro Moreno Cárdenas Alito, a quien traen a pan y agua por culpa de los cañonazos de la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, quien todavía externa, que se divierte.

Nexos y Contextos

 “Morenistas” señalan a Laura García Arjona de traidora  y conspiradora

            Vaya alboroto se registra en las entrañas del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en Tapachula, cuando en pleno proceso interno para la designación de consejeros estatales, la ex titular del DIF Municipal, Laura García Arjona, fue señalada como presunta actora intelectual de las campañas de resentimiento orquestadas en colonias y comunidades a través de los esbirros que estuvieron a su servicio en la secretaria y dirección municipal, quienes al tener padrones de liderazgos, buscan armar un borlote contra la vida democrática de Morena que, les dio a probar las mieles del poder.

            Los militantes del partido de la cuarta transformación, anunciaron denuncias públicas en torno a los hechos que empañan el proceso cívico y democrático.

Simpatizantes y militantes de Morena, vincularon a Marcos Viaña, ex director de gobierno local presuntamente involucrado en la agresión y tortura de indígenas durante el lunes negro y ligado a Laura García Arjona, de la desestabilización interna de Morena, producto de una desesperación política, ante la evidente remoción de consejerías estatales próximas como parte del proceso de renovación.

Son tachados igualmente de alta traición y violación a los preceptos del partido político, por apoyar al Partido Verde en el pasado proceso electoral de forma descarada, pese a ser beneficiados ampliamente en cargos públicos conferidos por el gobierno de López Obrador.

            Al sentirse fuera del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), buscan reventar la próxima asamblea a celebrarse el sábado 30 de julio, donde conforme a los estatutos y lineamientos de la dirigencia nacional, serán designados los nuevos consejeros políticos estatales previo a la nominación del próximo dirigente estatal del partido guinda en Chiapas.

            Al sentirse extirpados como macula cancerosa, Laura García y sus secuaces, buscan caos interno para tratar de desbaratar el llamado proceso democrático, ante su inminente destierro político. ¿Cuál será la reacción pública de las huestes morenistas que no la toleran ni la soportan?

Acertijo Público

*¿Qué Diputado local encargado de las finanzas del congreso local, se estaba haciendo rosca con los incentivos a favor de las secretarias que, por cierto; son bastantes en el recinto parlamentario chiapaneco?… Tras una madriza mediática que le propinaron periodistas en Tuxtla Gutiérrez, producto de las denuncias de inconformidad, trascendió que el dinero que pretendían peinarse y jamás entregar, fue devuelto sin polvo ni paja a las beneficiadas. Vaya manera de andarse jineteando el dinero ajeno allá en el congreso local de Chiapas. Una sinvergüenzadas de la más grande, atroz y estúpida en tiempos de grave crisis económica e inflación.

*Tuxtla Chico, está más perdido que los hijos de la llorona y con un tremendo silencio sepulcral peor que las sesiones ordinarias del Partido del Trabajo, que si silva una mosca, se escucha hasta Unión Juárez.

Comentarios. antoniozavaletah@gmail.com 

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